Datos personales

Médico Internista e Intensivista, y estudioso de las Santas Escrituras (La Biblia), y un predicador incansable del verdadero monoteísmo bíblico, y sobre todo, del mensaje o evangelio del Reino de Dios, que es la única esperanza que tiene este mundo para sobrevivir a su destrucción total.

sábado, 10 de julio de 2010

ALGUNOS PROBLEMAS EN QUE SE METEN LOS TESTIGOS DE JEHOVA CUANDO SOSTIENEN QUE NO SON HERMANOS DE CRISTO, MENOS AUN, HIJOS DE DIOS


El problema que requiere una solución

Es tragicómico escuchar a los Testigos de Jehová, y a algunos que lo fueron, y ya no lo son, o al menos, eso parece, sostener terca y empecinadamente que ellos de ninguna manera son parte de la familia de Dios, es decir, hermanos de Cristo e hijos de Yahweh. Y digo esto porque nuestro querido amigo, el hispano Armando López Golart, quien maneja su propio sitio web para defender lo indefendible, nos quiere convencer a todos de que Yahweh es un Dios que sí hace acepción de personas, y que de todos los millones de fieles que dicen creer en Jesús, sólo ha escogido a una minoría de ellos para que se dirijan a Él como Padre… y a su Hijo Jesucristo, como hermano. Ah, y de paso, él piensa que no tiene el “llamado” y el “privilegio” de ser un hermano de Cristo, y mucho menos aún, de ser un hijo de Dios. Pero yo me pregunto esto: ¿cómo hará el Sr. Armando López Golart cuando tiene que dirigirse a Dios en oración, ya sea al levantarse, o a la hora de almorzar, o a la hora de irse a la cama, o cuando tiene una petición muy especial que hacerle por cualquier circunstancia apremiante? ¿Acaso empezará orando: “Mi Yahweh Soberano, o “Su Majestad” o “Señor Todopoderoso”, pero no “Padre Mío”, o “Padre celestial”, porque, según él, no es su hijo? Definitivamente al Sr. Armando López se le hará difícil seguir la oración modelo de Jesús, donde el propio Jesús enseña a sus discípulos a orar, empezando con la frase “Padre Nuestro” (Mateo 6:10). Realmente es triste saber que hay supuestos cristianos que se privan ellos mismos de una auténtica filiación e intimidad con el Dios Creador. Realmente es todo una desgracia!

Dios y Padre

Lo que el Señor López Golart no entiende todavía es que el Dios de los fieles es también Padre de esos mismos creyentes. El cristiano verdadero no puede separar a Dios de su paternidad. Si yo acepto a Yahweh como Dios, también lo estoy aceptando como Padre. La locución “Un Dios y Padre” es lo que repetidamente nos presenta la Biblia.

Pareciera que la lista de pasajes del NT que les mostramos a continuación es apócrifa para los Testigos de Jehová, y para el mismísimo Sr. Armando López Golart. Estos son los pasajes que todos debemos considerar:

1. Romanos 15:6: para que unánimes, a una voz, glorifiquéis al DIOS Y PADRE de nuestro Señor Jesucristo.

2. 1 Corintios 15:24: Luego el fin, cuando entregue el reino al DIOS Y PADRE, cuando haya suprimido todo dominio, toda autoridad y potencia.

3. 2 Corintios 1:3: Bendito sea el DIOS Y PADRE de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación,

4. 2 Corintios 11:31: El DIOS Y PADRE de nuestro Señor Jesucristo, quien es bendito por los siglos, sabe que no miento.

5. Gálatas 1:4: el cual se dio a sí mismo por nuestros pecados para librarnos del presente siglo malo, conforme a la voluntad de nuestro DIOS Y PADRE,

6. Efesios 1:3: Bendito sea el DIOS Y PADRE de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo,

7. Efesios 4:6: un DIOS Y PADRE de todos, el cual es sobre todos, y por todos, y en todos.

8. Efesios 5:20: dando siempre gracias por todo al DIOS Y PADRE, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo.

9. Filipenses 4:20: Al DIOS Y PADRE nuestro sea gloria por los siglos de los siglos. Amén.

10. 1 Tesalonicenses 1:3: acordándonos sin cesar delante del DIOS Y PADRE nuestro de la obra de vuestra fe, del trabajo de vuestro amor y de vuestra constancia en la esperanza en nuestro Señor Jesucristo.

11. 1 Tesalonicenses 3:11: Mas el mismo DIOS Y PADRE nuestro, y nuestro Señor Jesucristo, dirija nuestro camino a vosotros.

12. Santiago 3:9: Con ella bendecimos al DIOS Y PADRE, y con ella maldecimos a los hombres, que están hechos a la semejanza de Dios.

13. 1 Pedro 1:3: Bendito el DIOS Y PADRE de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos,

Hay que estar demasiado ciego para no darse cuenta que es imposible que alguien pueda decir que Yahweh es su Dios. pero no su Padre. Simplemente es una aberración. Para los musulmanes o budistas, por citar dos religiones importantes, Yahweh puede ser el Dios de los cristianos y hebreos, pero este Dios no es el Padre de los islámicos y budistas, o de los miembros de cualquier otra religión conocida, porque simplemente los miembros de estas religiones no han recibido a Cristo para constituirse en miembros de la familia de Dios (Juan 1:12). Así que en cierto modo los Testigos de Jehová se encuentran en la misma situación que los miembros de las otras religiones no cristianas, ya que si bien ellos creen que Yahweh es Dios de los Hebreos y de los Cristianos, no quieren realmente recibir plenamente a Cristo para constituirse en verdaderos Hijos de Dios.

Los Testigos de Jehová de las “otras ovejas” y el Sr. López Golart separan la deidad y la paternidad de Yahweh, y sólo se limitan a tener un Dios que por lo visto está algo distante de ellos, y a quien no le pueden llamar “Abba Padre” es decir, “papito”, sino simplemente: “Su Majestad”, Su Señoría”, o “Señor Altísimo”. ¿No es esto trágico, estimados amigos? Sin embargo, ¿qué vemos en las congregaciones de los Testigos de Jehová? …¡Y aquí viene la inevitable contradicción! Cuando se le pide a algún TJ no “ungido” (no hijo de Dios) para que ore por el culto del día, éste empieza su oración, diciendo: “Padre celestial…” ¿En qué quedamos, entonces? ¿Son o no son hijos de Dios los “no ungidos” de las congregaciones jehovístas? Si los TJ no ungidos llaman a Yahweh “Padre” es porque ellos son sus hijos (de Dios). No hay otra salida. ¿No le parece, Sr. López?

Hijos de Dios o hijos del diablo

Otro punto que no les entra aún en la cabeza a los TJ, y al Sr. Armando López, es que todo aquel no está con Cristo, contra él está. Si uno no es de Cristo, contra Cristo está. Dice Jesús en Mateo 12:30: “El que no es conmigo, contra mí es; y el que conmigo no recoge, DESPARRAMA”.

Si uno recibe a Cristo, se constituye automáticamente en hijo de Dios (Juan 1:12); y si uno no lo recibe, simplemente se constituye en hijo de alguien más, en este caso, del adversario (el diablo). Recordemos que Jesús les dijo a sus detractores Judíos que le odiaban, y que no querían recibirlo, que ellos tenían como padre al mismísimo diablo (Juan 8:44).

Siguiendo este principio, no hay tibios para el Señor. O se es frío o caliente, pero no tibio. O se es un Hijo de Dios o no se es…se es hijo de Dios o se es hijo del diablo. Pero los Testigos de Jehová insisten que sólo una minoría de ellos son “hijos de Dios”, mientras que el resto no. Si esto es así, no queda otra cosa que afirmar que la gran mayoría de Testigos de Jehová, incluyendo al ex Testigo, el Sr. López Golart, son hijos del diablo. En pocas palabras, ellos son ni fu ni fa, o ni chis ni mus.

Los hermanos de Cristo: ¿Quiénes son?

Los Testigos de Jehová se cierran diciendo que sólo la clase ungida de 144,000 personas es la verdadera hermandad de Cristo. Sin embargo, Jesús dice algo que pone en serios apuros, tanto al Sr. Armando López, como a muchos Testigos de Jehová que enseñan esta mentira espantosa. Así dice el Señor: “Porque todo aquel que hace la VOLUNTAD de mi Padre que los cielos, ése es mi hermano, y hermana, y madre” (Mateo 12:50). Tomen nota, amigos Testigos de Jehová, y simpatizantes de esta secta, de lo crucial que es esta declaración de nuestro Señor. El dice muy claramente que todo aquel que hace la voluntad del Padre, ése es su hermano, hermana y madre. Si los Testigos de Jehová dicen que sólo 144,000 miembros “ungidos” son los hermanos de Jesús, entonces yo les pregunto, lo siguiente: ¿La voluntad de quién están haciendo las “otras ovejas” que no constituyen, supuestamente, la hermandad de Jesús? ¿La del diablo? ¡Seguro que sí!

Pero el Sr. Armando López no quiere ser hermano de Cristo, sino simplemente un “hermanastro”, o un simple “colaborador” de la causa de Cristo y de su reino, muy lejos de la intimidad de la familia de Dios. Si ése es su sentir, entonces su auto estima está por los suelos, y necesita ser reprogramado según la Palabra de Dios.

Yo me siento feliz de saber que soy un hijo de Dios, y un hermano de Cristo, y un heredero legítimo de las promesas y riquezas del Altísimo en su reino venidero. Dios no quiere tener en su seno personas que no sean hijos obedientes y leales a sus mandatos. Todos los que están alrededor de Dios son sus hijos, incluyendo a los ángeles que están a su servicio. Los jueces de Israel eran hijos de Dios, y también los reyes de Israel, es decir, todos los que fueron ungidos por él. Hoy, nosotros somos ungidos por Dios para ser, no sólo sus hijos, sino también los coherederos del reino para ejercer nuestros cargos de gobernantes de la nueva sociedad.

¿Para quiénes es el Espíritu Santo?

Para los Testigos de Jehová, y seguramente para el Sr. López, todos los cristianos debemos reflejar los frutos del Espíritu. Estos frutos de Espíritu están alistados por Pablo en Gálatas 5 23-25: Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley. Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos. Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu. Así que todos podemos convenir que para reflejar el amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y templanza, de alguna manera el Espíritu Santo debe estar en o con nosotros. Sin embargo, los Testigos enseñan que el Espíritu Santo no es para todos los creyentes, sino para unos pocos elegidos. Pues bien, si alguno dice no tener el Espíritu Santo porque a él no le toca nada, entonces lo que esta persona reflejará precisamente lo contrario a los frutos del Espíritu, o sea, los frutos de la carne. Pero los Testigos de Jehová dicen que sólo los ungidos tienen el Espíritu Santo, al haber sido ungidos por él en algún momento de su llamado, como una voz interior que les dice: “Tú eres mi ungido, tú te irás al cielo”.

Es evidente que algunos cristianos se han olvidado que “engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso, ¿quién lo conocerá?” (Jeremías 17:9). Pero este es precisamente el error de los Testigos de Jehová y de algunos ex testigos que aún arrastran este desvío y que insisten en que el ungimiento del cristiano es sólo una cuestión de oír una vocecita interior que lo llama a ser un hijo de Dios, y para que más adelante poder “volar” al cielo para estar con Cristo y el Padre. Semejante tontería sólo puede caber en la mente de los neófitos.

Definitivamente aquel que no tiene el Espíritu de Dios no sólo no podrá ser un hombre espiritual, sino que tampoco podrá resucitar de entre los muertos para entrar en el reino. He aquí las palabras de Pablo: “Y si el Espíritu de aquel que LEVANTÓ de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que LEVANTÓ de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros”. Así que los Testigos de Jehová se encuentran en un problema enorme cuando sostienen que sólo la clase de los ungidos tiene el Espíritu Santo, pues esto significaría que la gran mayoría de Testigos de Jehová, carentes de este Espíritu vivificador, no tendrán ninguna posibilidad de resucitar de entre los muertos. ¿Se dan cuenta los TJ en el tremendo embrollo en que se han metido por enseñar algo tan disparatado?

También es interesante leer que el Espíritu Santo es dado sólo a aquellos que obedecen a Dios (Hechos 5:29,32). Si alguno no obedece a Dios no puede recibir Su Espíritu. Así de sencilla es la cosa! Pero nuevamente los Testigos de Jehová caen en una trampa, pues si la gran mayoría de ellos no tienen el Espíritu Santo en ellos, entonces se debe concluir que no están obedeciendo a Dios. Y ya sabemos cuál es el destino de los que desobedecen a Dios.

Las Escrituras nos dicen que los cristianos abundan en esperanza, la cual los impíos carecen, y esto debido al poder del Espíritu Santo que funciona en nosotros. Así lo expresa Pablo en Romanos 15:13 cuando dice: “Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en esperanza por el poder del ESPÍRITU SANTO”. Si alguno no tiene el Espíritu Santo, no tiene una verdadera esperanza sólida. Y si alguien pierde la esperanza en Dios y en sus promesas, es porque ha perdido el Espíritu de Dios.

Una iglesia muy particular

Los Testigos de Jehová enseñan que la iglesia que Cristo salvó con su sangre está compuesta por sólo de 144,000 personas “Testigos de Jehová”. El resto de los Testigos de Jehová, unos seis millones de personas, están fuera de esta élite selecta, y se les ubica en el grupo de los que tienen esperanza terrenal (“las otras ovejas”). Esta creencia, que desafortunadamente es compartida por el Sr. Armando López, un ex Testigo de Jehová que aún arrastra con algunas taras del Jehovísmo Atalayado, deja a millones de personas fuera del cuerpo de Cristo. Recordemos que la Biblia iguala el cuerpo de Cristo con su iglesia, siendo Jesús su cabeza. Es decir, lo que están haciendo los Testigos de Jehová con el cuerpo de Cristo es mutilarlo y lo han reducido a un grupito minúsculo de 144.000 personas.

Por otro lado, esta cruel mutilación que hacen los Testigos de Jehová del cuerpo de Cristo incluye la decapitación, pues aquellos que debieron ser miembros de su cuerpo, y por capricho no se les permite que lo sean, sobreviven sin una cabeza. Recordemos que Cristo es la cabeza de su cuerpo, y si alguien no está en el cuerpo de Cristo como miembro, no puede tener cabeza. Asimismo, si estos no ungidos están “decapitados”, entonces no están obligados a seguir las directivas de la cabeza/Cristo puesto que se les ha negado la membresía en el cuerpo. Pero sucede que todos los Testigos dicen ser imitadores de Cristo, y fieles observantes de sus mandamientos. Pero para que ellos puedan ser fieles observantes y seguidores de Cristo, necesariamente todos ellos tienen que estar dentro de su cuerpo, que es su iglesia. Esto significaría también que necesariamente deberían ser todos “ungidos” y llenos del Espíritu Santo, y así ser parte de la familia de Dios.

Ahora bien, los Testigos de Jehová tienen ancianos (“pastores”) que dirigen sus congregaciones, y donde un buen número de ellas carecen de ungidos o de la clase de la iglesia. El vocablo “congregación” es sinónimo de “Iglesia”, y los TJ simplemente no pueden dejar de reconocer que grupos de creyentes que se reúnen para adorar a Dios son verdaderas iglesias (= congregaciones), porque eso es lo que son en realidad. Entonces, para escapar del dilema, ellos usan siempre la palabra “congregación”, y así confundir a propios y a extraños. Recordemos que para los Testigos de Jehová sólo una minoría de ellos es parte de la iglesia de Cristo y no pueden darse el lujo de cometer el error de llamar a sus congregaciones usando el término “iglesias” porque caerían en una flagrante contradicción.

Ahora bien, parece que los TJ, y el Sr. Armando López, olvidaron que los primeros cristianos fueron bautizados para ser añadidos a la iglesia. El bautismo, aunque no les guste a los TJ, y a mi amigo, el Sr. Armando López, nos introduce a la iglesia de Cristo, es decir, nos hace miembros de su cuerpo. Sólo basta dirigirnos a Hechos 2:41-47, donde leeremos, lo siguiente: Así que, los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día como tres mil personas. Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones. Y sobrevino temor a toda persona; y muchas maravillas y señales eran hechas por los apóstoles. Todos los que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas; y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos según la necesidad de cada uno. Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón, alabando a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos”. Si uno compara lo subrayado en el verso 41 y lo subrayado en el verso 47, veremos que los bautizados fueron añadidos a la iglesia. De modo que si el Sr. Armando López fue bautizado por inmersión al igual que los supuestos “ungidos”, él también ha sido añadido a la iglesia o cuerpo de Cristo, y lo mismo se esperaría que ocurriese con los millones de Testigos de Jehová que pertenecen a la clase de “las otras ovejas”, puesto que ellos también se han bautizado por inmersión.